En medio de la oportunidad que se ha abierto para México con el Nearshoring, la banca en México cuenta con 1.2 billones de pesos para financiar proyectos que detonen este fenómeno, aseguró el presidente entrante de la Asociación de Bancos de México (ABM), Julio Carranza.
En entrevista con Forbes México en marco a la 86 Convención Bancario, el banquero señaló que una de sus prioridades al frente del organismo será impulsar el crédito en el país, ya que todas estas inversiones que vienen generan una oportunidad para el sector.
De acuerdo con el presidente de la ABM, el año pasado la captación creció hasta niveles de 7.3 billones de pesos, contra 6.1 billones de pesos de la cartera de crédito, por lo que las instituciones tienen 1.2 billones de pesos listos para prestar.
“Tenemos una gran oportunidad para seguir creciendo, otra cosa es que el enfoque que queremos dar es hacia las empresas medianas y familiares en todas las regiones del país”, aseguró Carranza.
El directivo añadió que el crédito a pymes el año pasado tuvo un crecimiento vigoroso, alcanzando los 875,000 millones de pesos, sin embargo, todavía están por debajo del saldo de la cartera antes de la pandemia.
No obstante, Carranza consideró que el crédito al consumo quizá va a tener un momento de incertidumbre mientras se sabe qué pasa con las tasas de referencia del Banco de México (Banxico) y ver hacia dónde se va, pero cree que la inflación ya se va a controlar y ya llegó a su límite superior, mientras que la recesión en Estados Unidos no afecte la recuperación.
“La oportunidad que hay con el tema del Nearshoring, la inversión regional, tenemos una gran oportunidad de crecimiento, aunque ahorita está muy concentrado, muy regionalizado en Nuevo León, tienes crecimiento ya en varios estados que antes no pintaban para este tipo de inversiones”, detalló.
Precisó que todo esto va a generar una importante demanda de crédito debido a toda la infraestructura que se necesita para ayudar a estas empresas tengan lo que requieren.
Reiteró que para México esto es una gran oportunidad para impulsar el crecimiento de la economía, así como la integración regional, lo cual para la banca representa una oportunidad para dar más crédito. El directivo recordó que el año anterior el sector tuvo un crecimiento de 12% en términos nominales, pero cree que en 2023 tendrá buen dinamismo, independientemente del avance de las tasas de interés.
Asimismo, Carranza destacó que impulsarán la inversión en tecnología, para que las transacciones cada vez sean más electrónicas y más digitales, de hecho, dijo, el año pasado se llegó a 71 millones de contratos de banca móvil, 20% más contra 2021.
“Todo esto también va por el enfoque que tiene la banca de que la sucursales bancarias sean hoy la plataforma por donde entren los clientes que de manera tradicional vienen, pero es la plataforma del lanzamiento de los clientes a la banca digital y también la oportunidad que tenemos de que los jóvenes entren precisamente por este conducto”, explicó.
Carranza dijo que México tiene una banca más preparada para toda esta nueva etapa en donde a través de estas inversiones se logre una baja en los costos para la banca y para los clientes del sistema financiero.