Las empresas Fintech en México, obtuvieron un importante crecimiento durante este año que concluyó, debido a las necesidades que tiene la población en cuanto a servicios financieros, que el mercado vigente no atiende aún.

México es un país en crecimiento constante, con población que trabaja y requiere una cuenta bancaria para sus actividades diarias, o alguna otra forma de ahorrar e invertir, y el sistema bancario no está disponible para toda esta demanda aún.

El crecimiento es porque hay un sector financiero que todavía es muy vertical, tienes muy pocos bancos que abarcan la mayoría del mercado y tenemos poblaciones que están demandando más servicios financieros, y las soluciones Fintech llegan mucho más rápido que una nueva solución de un banco. En América Latina, México y Brasil son los países con el mayor ecosistema Fintech y siempre se están peleando por el primer lugar.

De acuerdo con la segunda edición del informe Fintechen América Latina 2018: crecimiento y consolidación, desarrollado por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y Finnovista, Brasil aporta el mayor número de emprendimientos con 380, seguido por México con 273, Colombia 148, Argentina 116 y Chile con 84.

Actualmente en México los seis segmentos principales son:

– Pagos y remesas.

– Préstamos.

– Gestión de finanzas empresariales.

– Gestión de finanzas personales.

– Crowdfunding.

– Tecnologías empresariales para instituciones financieras.

A diferencia de Brasil, México tienen un poco más de startups en préstamo, porque las Pymes están buscando préstamos para poder hacer crecer y operar sus negocios, y para la economía en general, eso es bueno.

En su informe, Finnovista y el BID destacan que, en América Latina, México es la primera jurisdicción que se plantea la adopción de estándares de banca abierta, siendo este uno de los puntos que están recogidos en la denominada Ley Fintech, que fue aprobada en marzo de 2018.

Sin embargo, aún falta aprobar la ley secundaria que determinará los estándares técnicos comunes bajo los cuales el mercado podrá realmente beneficiarse de un marco de banca abierta.

Además, la Ley de Fintech en México ha sido un ejemplo pionero sobre cómo abordar la regulación desde una perspectiva global y con proporcionalidad.

Destaca que el objetivo de la nueva ley, se centra en ofrecer una mayor certeza jurídica a través de un marco legislativo para regular las plataformas denominadas Instituciones de Tecnología Financiera (ITF) y establecer un marco que asegura una competencia justa entre los emprendimientos Fintech y las instituciones financieras y bancarias tradicionales.