Las ganancias del Banco de México (Banxico) a septiembre de este año y las condiciones del mercado cambiario elevan la posibilidad de que este año sea otro sin remanentes de operación, por lo que Alejandro Díaz de León dejaría el banco central sin haber dado un solo peso al gobierno por este concepto.
Los estados financieros del Banco de México señalan que, al 30 de septiembre, el instituto obtuvo una ganancia por 38 mil 531 millones de pesos, asociada a la depreciación de 3.3% del tipo de cambio (de 19.91 a 20.53 pesos por dólar entre el cierre de diciembre 2020 y septiembre 2021), que elevó el valor en pesos de las reservas internacionales.
La ganancia descrita, sumada al capital de cierre de 2020 por 53 mil 361 mdp, ubicaron al capital contable de Banxico en 91 mil 892 millones de pesos (0.35% del PIB) al noveno mes del año, monto inferior al 0.58% del PIB establecido en la Ley del Banco de México como parámetro de referencia.
Ese 0.58% del PIB en 2021 equivale a 151 mil 121 millones de pesos, según la proyección del Paquete Económico 2022 de la Secretaría de Hacienda.
Así, para que haya remanentes de operación, en el cuarto trimestre del año el banco central deberá registrar una ganancia superior a 59 mil 229 millones de pesos, monto que se lograría con un dólar de cierre de año que sea mayor a 20.98 pesos, de acuerdo con un modelo econométrico elaborado por Excélsior.
Sin embargo, las expectativas de los economistas del sector privado ubican al tipo de cambio con un cierre de 2021 en 20.43 pesos por dólar, por lo que, pese a que habría ganancias totales en el año, no alcanzaría a cubrir el capital contable descrito, tal como ocurrió en 2020.
Si bien en 2020 el Banco de México obtuvo una ganancia neta de 165 mil 17 millones de pesos, no entregó remanentes al gobierno federal.
Esto obedeció a que el instituto central usó el 74% de esos recursos (121 mil 775 mdp) para cubrir las pérdidas de ejercicios anteriores.
Además, lo restante (43 mil 242 millones de pesos) lo usó para incrementar su capital contable previo, lo que ubicó a este último en 0.23% del PIB al cierre del año pasado, nivel inferior al 0.58% del PIB de meta establecida en la ley.
Por esta razón, el banco central no entregó remanentes en abril de este año al gobierno federal.
Gerardo Esquivel, subgobernador del Banco de México, explicó en redes sociales que en estricto sentido no es tan deseable para el país que se generen remanentes de operación, debido a que esto significó una fuerte depreciación del tipo de cambio, lo que eleva la deuda en dólares del gobierno y del sector privado.