El Banco de México (Banxico) aseguró que las presiones inflacionarias son mayores a lo que se habían anticipado por lo que actualizó al alza su pronóstico sobre al inflación para 2022.
La institución calcula que el índice cerrará este año en 6.4 %. En su pronóstico anterior, esperaba un cierre en 5.5 %. De hecho, prevé que la inflación concluya el presente trimestre en 7.6 por ciento y se ubique después en 7 por ciento en el tercer trimestre.
El Banco de México explicó, en su comunicado de política monetaria que la inflación enfrenta presiones adicionales provenientes de conflictos geopolíticos (la guerra de Rusia en Ucrania) y los confinamientos que fueron impuestos en China por brotes de COVID.
“En abril las inflaciones general y subyacente registraron tasas anuales de 7.68 por ciento y 7.22 por ciento, respectivamente, su nivel más alto desde enero de 2001, mientras que sus expectativas para 2022 y 2023 se incrementaron de manera importante”, agregó en su comunicado de política monetaria.
Banxico decidió subir la tasa de interés por octava vez consecutiva, y es la cuarta ocasión al hilo en la que el incremento es de 50 puntos.
“La Junta de Gobierno del Banco de México decidió incrementar en 50 puntos base el objetivo para la Tasa de Interés Interbancaria a un día a un nivel de 7.0%, con efectos a partir del 13 de mayo de 2022”, informó el banco central.
La gobernadora y los subgobernadores evaluaron la magnitud y diversidad de los choques que han afectado a la inflación y sus determinantes, así como el riesgo de que se contaminen las expectativas de mediano y largo plazos y la formación de precios.
Los funcionarios consideraron también los mayores retos ante el apretamiento de las condiciones monetarias y financieras globales, el entorno de acentuada incertidumbre, las mayores presiones inflacionarias asociadas al conflicto geopolítico y al resurgimiento de casos de Covid-19 en China, y la posibilidad de mayores afectaciones al entorno inflacionario.
El aumento estuvo en línea con el consenso de analistas, quienes aseveran que la autoridad monetaria debe hacerle frente a las presiones inflacionarias vistas recientemente.
Con el aumento a la tasa de interés, la postura de política monetaria se ajusta a la trayectoria que se requiere para que la inflación converja a su meta de 3 por ciento dentro del horizonte de pronóstico, añadió Banxico.
De acuerdo con datos del Instituto Nacional de Geografía y Estadística (INEGI) en abril la inflación general se ubicó en 7.68 por ciento en términos anuales, la mayor en 21 años.
Además del factor inflacionario, analistas coindicen que Banxico debe acompañar a la Reserva Federal de Estados Unidos (FED) con alza de tasas en la misma magnitud y ritmo.