Una dieta détox, es un proceso de desintoxicación en donde mediante una buena alimentación, vamos desechando toxinas, eliminamos impurezas y residuos de nuestro cuerpo.
¿Suena increíble no? Pues imagínate que podemos hacer una dieta detox pero en tus finanzas, en donde podamos eliminar aquello que nos hace mal, y que debemos desintoxicar para llevar una vida financiera saludable.
Detox financiero es una guía práctica y comprobada para mantener unas finanzas sanas, con la cual responderás a preguntas como:
¿Ahorro o pago deudas?
¿Es posible y vale la pena ahorrar?
¿Cómo salir de deudas?
¿Cómo aumentar mi flujo de efectivo sin desmejorar mi calidad de vida?
¿En qué invierto el dinero que he ahorrado?
¿Cómo aumento mis ingresos sin sacrificar la seguridad?
¿Cómo invertir en propiedades inmobiliarias?
La pandemia del COVID-19 expuso la fragilidad financiera de la mayoría de los hogares, y nos ha obligado a recapacitar y analizar a conciencia la situación de nuestras finanzas personales.
Para algunas personas, la relación con sus gastos e ingresos es complicada, ya sea por falta de organización o por eventos externos como la cuesta de enero. Por definición, a este conjunto de prácticas nocivas se le conoce como Intoxicación financiera, que básicamente se refiere al descontrol o falta de conciencia sobre nuestro dinero.
Pongámoslo así, si se tiene una mala salud financiera, aumentamos deudas o no llegamos a fin de mes, la razón está más allá de la mala suerte o que las cosas estén excesivamente caras (no subestimemos la inflación, esa es real), sino los malos hábitos que tenemos al usar nuestro dinero, o sea, gastamos mal.
Por ejemplo, al igual que con la alimentación, si consumimos alimentos que causan daño, el funcionamiento de nuestro cuerpo se verá perjudicado, si mantenemos buenos hábitos alimenticios nuestro cuerpo funcionará mejor y gozaremos de una mejor salud.
Por eso, la relación entre hábitos financieros y una salud económica es causa y efecto. Por fortuna, la intoxicación financiera tiene cura y está al alcance de todos.
Esto te puede ayudar… toma nota:
– Revisa con detenimiento tus gastos mensuales.
– Piensa en objetivos realizables, realistas, divertidos y motivantes: Todo depende de tus ingresos. No porque no te alcance para un carro del año, significa que no puedes aspirar a objetivos más sencillos como comprar una sala nueva o salir en familia de vacaciones. Recuerda que lo más importante es tener una buena calidad de vida, sin estrés financiero.
– Revisa estados de cuenta: Debemos llevar un control minucioso de los gastos que hacemos en nuestra tarjeta de crédito, asegúrate de que no tengas cargos que no reconozcas.
– Haz un balance entre tus ingresos y gastos.
– Elabora un presupuesto mensual lo más honesto posible: cuánto necesitas para vivir y cuánto puedes gastar sin que lo primero se vea afectado.
– Empecemos con las deudas pequeñas: Poco a poco vamos eliminando aquellas deudas que nos causen más ruido, empecemos por las pequeñas o las que tengas un interés alto para ir bajando nuestra deuda.
– Cancela esos boletines electrónicos: Si queremos evitar la tentación de comprar en línea, desuscríbete de esos boletines que solo nos mandan ofertas para que caigamos en las garras de las compras.
– Mata dos pájaros de un tiro: Eliminemos de nuestra vida hábitos o vicios que nos están generando un gasto, como tomar, fumar, juegos de azar, alimentos que nos hagan subir de peso… en fin, si podemos hacer un detox financiero, también podemos ayudarle a nuestro cuerpo a mantenerlo saludable.
– Conexión con amistades saludables: Es momento también de desintoxicar amistades, aquellos que nos empujan a querer vivir una vida que no podemos tener o que nos hacen gastar mucho, por una buena amistad no necesitas invertir mucho, ¿estás de acuerdo?, busquemos amistades o relaciones que nos ayuden a valorar otros aspectos de nuestras vidas.
-Ponte a prueba: Piensa en aquello que te genera un gasto significativo y que puedes eliminar de tu vida, por ejemplo, usar el transporte público en lugar de un servicio privado de transporte o tener tu celular por más de un año y no buscar cambiarlo por nuevas versiones, obviamente más caras… esto te ayudará a desahogarte de tus finanzas.
– Limita tus delivery (entregas en casa): Hoy más que nunca, debemos preparar nuestros alimentos en casa, por un tema de higiene pero también financiero, prueba cocinar desde casa y compara el gasto que hubieras hecho al haber ido a un restaurante o hubieras pedido por aplicaciones de delivery.
– Compara tus opciones: Haz una lista de todos los gastos que haces al mes: Pago de suscripciones (música, video, películas…) y revisa con cuál de ellas puedes vivir sin utilizarla, cada mes ve haciendo pruebas hasta que elimines todas aquellas que solo te generaban gasto.
– Una vez que lograste poner orden, establece un plan de ahorro, no importa que sean sumas pequeñas, recuerda que es mejor tener poco a no tener nada.
– Disfruta la vida, descubre cosas que puedes hacer sin gastar dinero, disfruta a tu familia, una buena charla, leer un libro, en fin, existen muchas opciones que podemos hacer sin gastar dinero. ¡Inténtalo!
Ahora bien, si tu situación es distinta y tienes metas a largo plazo o tus compromisos son más fuertes, recuerda que acercarte a un Financial Planner, será siempre la mejor opción para lograr tus metas, ya que no hay un secreto ni fórmulas mágicas para una buena salud financiera, el éxito se alcanzará con una buena planeación de tus ingresos y de los gastos: organizar, ahorrar e invertir.