La nueva estrategia «Hecho en México» de las empresas chinas está tomando forma, impulsada por las barreras comerciales impuestas por Estados Unidos.

Ante el freno que metió Estados Unidos a las importaciones de productos de China, las empresas del país asiático están impulsando su nueva estrategia “Hecho en México”, con la cual buscan recuperar el mercado norteamericano, reveló el director general de operaciones de “China HomeLife”, Binu Pillai.

La atracción del mercado mexicano radica en su constante crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) y su población en expansión, lo que genera una demanda creciente. La proximidad con Estados Unidos también es un factor clave, ya que ofrece ventajas competitivas que otros países no tienen.

En entrevista con MILENIO Binu Pillai expuso que varios fabricantes de ese país ya se están instalando en la nación con el objetivo de cumplir la regla de 30% de contenido regional en su manufactura y poder enviar sin aranceles al mercado vecino conforme a las reglas del T-MEC.

​“El mercado mexicano es absolutamente brillante, es muy bueno. Yo diría que México es el país de primer nivel en términos de interés (…) las empresas chinas que quieren venir, es simplemente porque la oportunidad está aquí, ya sea en términos de venta o inversión, es un gran acierto”, destacó.

Sobre el atractivo del mercado mexicano, Binu Pillai reconoció que el constante crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) y su crecimiento poblacional hacen atractivo su demanda porque crece de forma acelerada.

Puntualizó que a las empresas de China les resulta interesante la proximidad con Estados Unidos, ya que otros países no cuentan con esas ventajas que resultan competitivas.

Sin embargo, Karla Loyo, vicepresidenta de la Cámara de Comercio de Hong Kong en México (Mexcham Hong Kong), advirtió que las medidas arancelarias impuestas por México a los productos chinos podrían afectar negativamente a las empresas mexicanas.

«Creo que esto puede perjudicar más que beneficiar al sector manufacturero del país porque hay muchos insumos que se traen de allá y que aquí no se consiguen», señaló Loyo. «Yo veo una apertura para el gobierno entrante, por lo que yo creo que se puede mejorar la relación, ya que hay muy buena relación, y nunca ha habido algún cierre que pueda limitarnos obviamente, pero tenemos que cuidar nuestra relación con nuestro socio comercial natural que es Estados Unidos».

Pidió que estas medidas arancelarias deberían de ajustarse gradualmente en varios productos al no verse beneficiada la industria mexicana.

De acuerdo con información de la Secretaría de Economía, de 2019 a junio de 2024 llegaron a México mil 440.8 millones de dólares de inversión proveniente de compañías originarias del país asiático, cantidad 127% mayor a lo reportado entre 2013 a 2018.

La Ciudad de México es la entidad que más capital chino recibió desde 2019 a la fecha con 356.4 millones de dólares, le sigue Yucatán con 348 millones; Nuevo León, 223.1 millones; Jalisco, 177.5; Chihuahua, 77.4, y Sonora con 71.3 millones.

Por otro lado, la Secretaría de Economía inició la investigación antidumping sobre las importaciones de clavos para pistola originarios de China, independientemente del país de procedencia.

De acuerdo con lo publicado en el Diario Oficial de la Federación (DOF) se detalló que la empresa Deacero, solicitó que la dependencia investigara las importaciones de estos productos por supuestas prácticas desleales de comercio internacional en su modalidad de discriminación de precios.

Se determinó que las importaciones que serán investigadas son las que ingresen al país, a través de las fracciones arancelarias 7317.00.99 de la Tarifa de la Ley de los Impuestos Generales de Importación y de Exportación (Tigie) y al amparo de la Regla Octava, a través de la fracción arancelaria 9802.00.01 o por cualquier otra.