El grupo financiero Citigroup, pondrá a la venta a Banamex, uno de los principales y emblemáticos bancos del país; anunció su salida de los negocios de banca de consumo y empresarial en México, para enfocarse en sus clientes institucionales dentro de este mercado.
En un comunicado fechado en Nueva York, sede de Citi, se precisó que la salida de las operaciones de banca de consumo y empresarial en México, podrían incluir una venta o una operación de mercado de valores.
Alberto Gómez Alcalá, director corporativo de desarrollo institucional, estudios económicos y comunicación de Citibanamex, explicó que lo que se estaría vendiendo, es todo lo que no tiene que ver con banca institucional o lo que en México se le conoce como banca corporativa, es decir, los clientes más grandes, así como la banca de inversión, mercados y casa de bolsa.
Lo que estaría a la venta, puntualizó, es el resto: la licencia, la marca, la operación de sucursales, lo que tiene que ver con tarjetas, negocio de nómina, cartera hipotecaria, crédito familiar y empresarial, la parte patrimonial, la afore, la aseguradora, y hasta las fundaciones y el patrimonio cultural que tiene.
La banca de consumo y empresarial, mencionó, representa hoy alrededor del 60 o 70% del negocio de Citibanamex.
El directivo de Citibanamex subrayó que Citi obtendría una nueva licencia bancaria para seguir con sus operaciones en México; mientras que Banco Nacional de México (Banamex) conservaría la actual.
“Una vez que esté culminado (el proceso) serían dos entidades distintas, por eso Citi necesitaría una nueva licencia para operar, porque parte de las desincorporación incluye las licencias y la marca. Serían instituciones distintas y una operaría como Citi y otra como Banamex”, expuso.
También aclaró que el anuncio de Citi no tiene nada qué ver con algún tema ligado a las perspectivas económicas de México, sino que al contrario, el comunicado precisa que el grupo estadounidense mantiene una visión optimista sobre la perspectiva del país.
En este sentido, señaló que es una decisión que obedece más a la estrategia del grupo de concentrarse en los negocios donde es ampliamente competitivo, que es el de clientes institucionales. Esto ya lo ha aplicado en otros mercados de América Latina y Asia.
En su comunicado, Citi resaltó que continuará operando su Negocio de Clientes Institucionales con una licencia bancaria local, y que México se mantendrá como uno de los mayores mercados institucionales de Citi fuera de Estados Unidos.
En este sentido, subrayó que continuará invirtiendo y fomentando el crecimiento de dichas operaciones en México, junto con su franquicia de Citi Private Bank.
Al respecto, Jane Fraser, directora ejecutiva de Citi, expresó que la decisión de salir de los negocios de banca de consumo y empresarial en México, está completamente alineada a los principios de su visión estratégica y permitirá asignar recursos a oportunidades alineadas con las principales fortalezas del grupo, así como a sus ventajas competitivas, y podrán enfocarse en negocios que se beneficien de la conexión de su red global.
“México es un mercado prioritario para Citi, eso no va a cambiar. Anticipamos que México será un destino muy importante de inversión global y de flujos comerciales en los siguientes años y tenemos confianza en la trayectoria del país. Citi tiene una posición única para apoyar las actividades de nuestros clientes institucionales en los mercados de capitales internacionales, así como apoyar los flujos comerciales desde, y hacia México para nuestros clientes institucionales, y continuaremos realizando inversiones significativas en nuestro negocio institucional en México para mantenernos como líderes en dicho mercado”, puntualizó Fraser.
Citi abundó en que las salidas anunciadas de los negocios de banca de consumo en México, Asia y Europa, están alineadas con el reposicionamiento de la banca de consumo hacia centros “Global Wealth”, y el fortalecimiento de su presencia en los negocios de pagos y créditos y banca minorista en los Estados Unidos.
Sin embargo, este negocio se vislumbraba que iba a la baja. Topes en comisiones en la Afore, eliminación de las comisiones en tarjetas y cuentas de ahorro tendrán más afectaciones en los siguientes meses, aunado a que la caída de la economía ha afectado las colocaciones y elevado la morosidad; en el tema de comisiones plantean cobrar menos y tener, dado la propuesta que hubo hace dos años del senador Ricardo Monreal, menos de 200 comisiones activas para cobrar, cuando antes el promedio rebasaba las mil comisiones registradas. A lo anterior hay que sumar la mayor competencia con las fintech.
Pero surgen las preguntas:
¿Y los clientes y empleados cómo serán afectados?
Alberto Gómez Alcalá aclaró que, con este anuncio, los clientes no se verán afectados, ya que el banco seguirá con sus operaciones normales.
“No pasa nada. Los clientes que tengan una tarjeta, una hipoteca, etcétera, por supuesto que los vamos a seguir atendiendo (…) el día a día sigue. Si quieres un crédito hipotecario, o una tarjeta, tocas nuestra puerta y te vamos a atender. Si tenemos un programa de apertura e instalación de cajeros y sucursales, lo vamos a seguir realizando; los programas de inversión vigentes se van a ejecutar y van a seguir, en eso no cambia nada”, argumentó.
En cuanto a los colaboradores de Citibanamex, comentó que tampoco habrá una afectación, y, en todo caso, la mayoría se quedaría en Banco Nacional de México.
Todo seguirá funcionando igual, sólo cambiará de dueños… pero seguirá funcionando exactamente igual como hasta hoy.
¿Quién lo comprará?
Las especulaciones iniciarán al por mayor, desde bancos globales y latinoamericanos que han querido entrar desde siempre y no han podido. Ahí están los brasileños que no han dicho nada, pero siempre han intentado entrar al mercado mexicano; también apunte a inversionistas mexicanos con suficiente liquidez para adquirir un banco, bancos operando en México actualmente y que vean una oportunidad en tener una red como la que tiene Banamex. En fin, nos esperan muchos meses más para que el camino se vaya definiendo.
Algunas voces dicen que podrían interesarse Banorte, HSBC, Inbursa, o Banco Azteca… aunque por ahora, es muy prematuro decirlo.
Por lo pronto, mientras no se defina el comprador y el camino que será seguido por parte del que será el nuevo dueño de este banco, los clientes no tienen nada de qué preocuparse, su dinero está protegido, sus líneas de crédito activas, sus recursos en la Afore resguardados.
El banco sigue siendo una opción para abrir su primera cuenta o cambiarse, ya que el proceso podría ser aún largo, aún se requieren autorizaciones de distintas autoridades mexicanas y lo más importante, encontrar al comprador de este banco emblemático. Por lo pronto, la moneda está en el aire.