Hasta agosto de 2023, Deer Park registra ganancias de 591 millones de dólares y se espera que a finales de año se alcancen los mil millones.

La adquisición de la refinería de Deer Park en Texas resultó ser uno de los grandes aciertos de la actual administración de Petróleos Mexicanos (Pemex), ya que desde que la petrolera tomó el control del 100% de la refinería ha obtenido utilidades por mil 545 millones de dólares, afirmó Octavio Romero Oropeza, director general de la petrolera.

Durante su comparecencia en la Cámara de Diputados, Oropeza ‘presumió’ que los resultados financieros de la refinería han sido muy sólidos, ya que la instalación no reportaba resultados similares desde el 2007. “Además de que es la primera vez que la refinería cierra un ejercicio sin deuda”, dijo.

Consideró que la rentabilidad de Deer Park ha sido posible gracias a que se logró mantener el nivel de operación, “aprovechamos las condiciones del mercado de refinación y las reparaciones se ejecutaron de forma exitosa, conforme al presupuesto y en el tiempo planeado”, argumentó.

Los resultados financieros y operativos de la refinería Deer Park salvaron las cortas utilidades de la estatal Pemex en el último trimestre. La compra que hizo Pemex hace un par de años a Shell por alrededor de 600 millones de dólares, le está resultando un buen negocio a la petrolera. De hecho, las ganancias de Deer Park han superado a las de otras refinerías de Pemex e incluso a las de su división de exploración y producción, que históricamente ha sido la más rentable.

Pemex ha reportado en el trimestre pasado una utilidad neta de 4,682 millones de pesos, un desplome respecto al mismo trimestre del año anterior. En un cálculo simple, dice Francisco Barnés, un académico y exsubsecretario de Energía, las ganancias de Deer Park podrían representar el 81% de toda la utilidad neta de la petrolera estatal.

«Tenemos una refinería en Estados Unidos a la que se le mete el crudo adecuado, que tiene buen mantenimiento y tiene buenos catalizadores, y que nos está dando mucho más de lo que el resto de las refinerías mexicanas», dice Barnés.

Una buenas entre tantas malas…