Graves han sido los problemas y consecuencias que nos ha dejado la pandemia del Covid-19, a todos niveles y sectores. El mundo no volverá a ser igual.

Dicho evento, debido a su magnitud, ha dejado al descubierto muchos errores, vicios, carencias, y una larga cadena de etcéteras, entre ellas, una verdad absoluta que afecta a la mayoría de los mexicanos: no tenemos el hábito de ahorrar.

Está visto que la mayor parte de los mexicanos no tuvo la previsión de guardar dinero para emergencias o eventualidades como la actual contingencia, que ha dejado sin empleo ni ingresos para sobrellevarla, porque sí, se ha detenido la economía, pero desde el inicio para mucha gente, aún no habían pasado ni 7 días, y ya tenía problemas para subsistir, ¡7 días!… y en algunos casos, menos.

Quedó claro que viven al día, sin tener “un colchón” para el mañana… gane $ 10 pesos… me los gasto hoy mismo.

No hay que perder de vista que muchos sueldos, salarios e ingresos externos de la mayoría de la población, son insuficientes para la canasta diaria, pero seamos honestos, de esos $ 10 pudiste ahorrar 50 centavos, “un pellizquito”… pero no es tu costumbre…

“Hoy tengo para comer… mañana Dios dirá”

Aclaremos que no a todos les fue así, habrá muchos que sí tienen su fondo de contingencia, aunque sea pequeño, otros más, afortunadamente ganan lo suficiente para sobrellevar la crisis… y otros más ni siquiera les afectó, siguen cobrando su sueldo o una parte del mismo, y con eso la pasan bien.

Esto hablando de la población en general, pero también lo podemos ver en muchas empresas medianas, pequeñas y micro, que adolecen de los mismos vicios.

“30 días… y ya queremos cerrar por quiebra…”

Es buena oportunidad para enmendar el error, y cuando esto se recupere, poner manos a la obra y sacrificarnos un poco, prepararnos para la siguiente eventualidad, porque si algo es seguro… es que se repetirá, de otro tipo, otras circunstancias, quizá no tan grave, ni de tal magnitud… pero habrá otras más.

Es buena oportunidad para las microfinancieras que ofrecen servicios para ahorrar, que se hagan presentes y ofrezcan sus mejores productos, hacerlos atractivos y simples, establecer estrategias de captación, y así también ayudar a la población a protegerse de futuras macro tragedias económicas como la actual, hacer su labor de convencimiento.

¡No se los dejes a los bancos!

¿Tú qué piensas? ¿Tu si ahorras?